Castel Gandolfo
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POR QUÉ VISITAR CASTEL GANDOLFO
Al visitar el pueblo de Castel Gandolfo, además del Palacio Pontificio, podrás admirar numerosos vestigios de la antigua Roma. Entre ellos se encuentran los restos de la Villa de Domiciano y varias otras villas históricas que aún existen en la zona. Entre residencias históricas, iglesias y sitios naturales, hay mucho para descubrir. Por ejemplo, la iglesia de San Tommaso da Villanova, que da a la plaza principal y fue diseñada por Gian Lorenzo Bernini, o la Villa Pontificia con su Antiquarium, donde se conservan obras provenientes de la villa imperial, del teatro y del Ninfeo Bergantino, también conocido como los Baños de Diana.
UN POCO DE HISTORIA DE CASTEL GANDOLFO
Se cree que el área donde hoy se encuentra Castel Gandolfo era el sitio de la antigua ciudad de Alba Longa, posteriormente absorbida por la expansión de Roma. Ya en el siglo IV a.C., para regular las aguas del lago Albano, los romanos excavaron un túnel en la roca, una impresionante obra de ingeniería hidráulica. En la época republicana, la zona que rodea el lago era elegida para construir casas y villas, como la lujosa residencia del emperador Domiciano. Castel Gandolfo se hizo independiente ya en el año 1000, convirtiéndose en una pequeña comunidad agrícola que pagaba un tributo al monasterio para mantener su autonomía. El nombre Castel Gandolfo proviene de la familia Gandolfi, que hacia el año 1200 construyó un castillo que después pasó a manos de las familias Capizucchi y luego Savelli. A finales del siglo XVI, Castel Gandolfo dejó de ser un pueblo autónomo: el castillo fue embargado por la Cámara Apostólica debido a las deudas acumuladas, y el papa Clemente VII lo incluyó entre los bienes de la Iglesia y lo convirtió en la residencia de verano del Papa.
QUÉ ES HOY CASTEL GANDOLFO
Hoy en día, Castel Gandolfo, también conocida como la “Ciudad del Papa”, es famosa por ser la residencia de verano del Pontífice. Este animado y acogedor pueblo atrae a visitantes de todo el mundo que desean descubrir su belleza a orillas del lago Albano y en el espléndido marco de los Castelli Romani. El centro histórico aún está rodeado por las antiguas murallas, y en las inmediaciones se construyeron muchas residencias veraniegas de nobles romanos.
CURIOSIDADES SOBRE CASTEL GANDOLFO
¿Sabías que el Palacio Pontificio de Castel Gandolfo se ha transformado en un museo? Hoy pertenece a la Iglesia Católica y, desde 2014, goza del estatus de extraterritorialidad, que lo exime de impuestos y de posibles expropiaciones. El lago Albano, a orillas del cual se encuentra el pueblo, tiene origen volcánico y está rodeado de los Montes Albanos, formados principalmente por materiales volcánicos. Actualmente, el emisario artificial del lago ya no está en funcionamiento y, desde los años sesenta hasta hoy, el nivel del agua ha descendido aproximadamente cinco metros, también debido a la intensa explotación agrícola.
CÓMO VISITAR CASTEL GANDOLFO
Si te encuentras en Castel Gandolfo y deseas explorar el Jardín Barberini o las Villas Pontificias, puedes reservar una visita guiada con salida garantizada. Si, en cambio, estás en Roma y tienes un día para dedicar a descubrir los principales lugares vinculados al Vaticano, puedes participar en el tour “Vaticano en un Día”. Este paquete especial incluye entrada prioritaria con audioguía a los Museos Vaticanos, la Capilla Sixtina, los Jardines Vaticanos y las Villas Pontificias de Castel Gandolfo, con traslado de ida y vuelta en tren desde Roma. Alternativamente, si solamente prefieres visitar el Palacio Apostólico de Castel Gandolfo, también está disponible una visita con audioguía y salida fija, siempre con traslado en tren desde Roma.
OTRAS ATRACCIONES
Desde hace muchos años, Castel Gandolfo alberga el Palacio Pontificio, residencia de verano del Papa. El resto del año, el Pontífice reside en la Ciudad del Vaticano, una minúscula ciudad-estado en el centro de Roma que guarda inmensos tesoros artísticos como los Museos del Vaticano, la Capilla Sixtina, la Basílica de San Pedro y los famosos Jardines del Vaticano. Fuera de los muros del Vaticano se extiende la ciudad de Roma, donde puedes visitar sus monumentos reconocidos mundialmente, como el Coliseo, el Foro Romano, el Palatino y muchos otros sitios históricos. Si te han fascinado los Museos Vaticanos, no te pierdas la Galería Borghese y el Museo Nacional Romano (compuesto por el Palacio Massimo, el Palacio Altemps, las Termas de Diocleciano y la Crypta Balbi), o visita los antiguos Museos Capitolinos. Otros sitios de gran interés histórico y arqueológico son las Termas de Caracalla, la tumba de Cecilia Metella—donde fue enterrada y para quien se construyó un mausoleo—, la Villa de los Quintili en la antigua Vía Apia y las Catacumbas, lugares particulares para comprender las costumbres romanas antiguas. La grandeza y el esplendor romanos se reflejan también en monumentos famosos como el Altar de la Patria, el imponente Castel Sant'Angelo o el museo del Ara Pacis. Finalmente, entre los tesoros fuera del centro de Roma, te recomendamos la Villa d’Este en Tívoli, obra maestra del Renacimiento italiano, famosa por sus espléndidos jardines.
